El gobernador igual Barbosa recibió un estado sumido en la inseguridad y la corrupción, con un enorme rezago social y desigualdades poco más que inmorales. El 1 de agosto de 2019 el gobernador sostuvo que la seguridad y la salud serían dos de sus prioridades.
Desde el inicio de su gobierno se planteó la meta de acabar con la inseguridad para generar un mejor clima social que a su vez permitiera ir avanzando en el resto de los temas prioritarios.
A tres años del inicio de esta administración, los resultados son muy alentadores: los secuestros se han reducido en 76%, mientras que los homicidios dolosos disminuyeron un 20.5% y los robos en general bajaron en 18.7%.
Una de las grandes preocupaciones de los poblanos eran los robos a transportistas en las carreteras, mismos que han bajado en 42% gracias a los operativos que se han implementado en las principales carreteras del estado.
Otro de los delitos que más afecta a los poblanos es el de los feminicidios, mismos que han disminuido en 57.1% en el primer semestre de 2022, cuando se contabilizaron 11 crímenes. Uno de los casos más mediáticos fue el de la abogada y activista Cecilia Monzón.
Este fue uno de los tantos casos en el que el gobierno de Barbosa y sus instituciones mostraron su músculo y gran capacidad, pues los 4 implicados ya están detenidos. Entre ellos, Javier López Zavala, ex candidato priísta al gobierno del estado y autor intelectual del delito.
Los logros de la actual administración se ven relejados en la gran aceptación de Miguel Barbosa ante la ciudadanía, quien mes con mes es evaluado como uno de los mejores gobernadores del país, de acuerdo a las mediciones realizadas por C&E Research.