Una de las prioridades del gobierno de Miguel Barbosa es el combate a la pobreza y la desigualdad. En ese sentido, ha sido un eje de todas las acciones y de la ejecución del plan de gobierno del estado.
Sin embargo, generar dichas condiciones no es una cosa sencilla, pues se necesita erradicar muchos otros vicios como el de la corrupción que, hasta hace poco, imperó por muchos años en las cupulas políticas poblanas.
También, se necesitan fortalecer otras áreas, por ejemplo, en tema de inversiones, desarrollo, productividad, seguridad y procuración de la justicia. Los resultados de esta administración han sido contundentes, destacan:
El mantenimiento del Programa Escuelas de Tiempo Completo, que abona al cuidado adecuado de niñas y niños evitando la incorporación temprana a los mercados laborales.
El fortalecimiento del sistema de salud con la construcción de hospitales, el abastecimiento de medicamentos y equipo y un personal eficaz que ayudan a que las y los poblanos puedan recibir en un esquema completo de atención y prevención.
La procuración de la justicia mediante la Casas de Justicia entregada al Poder Judicial, así como sedes para la Fiscalía General de Justicia y el aumento de más de un tercio de presupuesto.
La construcción y rehabilitación de carreteras y vialidades, así como el alumbrado del periférico, que aportan a contar con una mejor infraestructura en materia de movilidad y conectar a todas las regiones del estado.
Estas y otras acciones que se traducen en acceso de la misma forma a los servicios y en Puebla, se sigue avanzando con un gobierno con sentido social, con la prioridad ultima de crear mejores condiciones de vida.